CALCETINES HIDRATANTES MAGIC FEET BY BETER

Como ya sabéis, el mes pasado fue mi cumpleaños, y una de las cosas que me regaló Sarín (mi mano derecha en la ofi) fueron estos calcetines hidratantes de Beter. «Para tu blog!» me dijo, así que, ahora que los he probado, quería contaros la experiencia.

Ya había probado antes unos calcetines parecidos de The Body Shop, pero no tienen nada que ver con estos, los de The Body Shop potencian el efecto de las cremas para pies y hay que ponerlos, después de la crema, durante toda la noche.

Estos calcetines son «mágicos», como su propio nombre indica, no sé a quién ni cómo se le habrán ocurrido pero ¡funcionan! Son una pasada, incluyen en su interior otro «calcetín» de gel, producido a base de Vitamina E, aceite de Jojoba, aceite de oliva y Aloe vera, todo un cocktail de ingredientes hidratantes que aportan a nuestros pies una sensación increible de hidratación y bienestar. Según su packaging, estos calcetines «hidratan, relajan y rejuvenecen la piel seca, áspera o con callosidades, a la vez que previenen las molestias causadas por los roces o presión del calzado».

La sensación es, no sé si alguna vez os ha pasado, como cuando vas a rehabilitación y te hacen un baño de parafina, que se queda la película sobre la piel, pues lo mismo. Es un poco raro pero muy agradable, en sus instrucciones pone que deben utilizarse los calcetines entre 30 y 50 minutos como máximo. Y es que, no me digáis por qué, pero a partir de los 50 minutos (que lo he comprobado) se empiezan como a adormecer los pies, así que mejor seguir las instrucciones, que para algo están! :O)  También dice que pueden usarse entre 3 y 5 veces por semana, y que su efecto puede potenciarse más aún añadiendo la crema o tratamiento reparador habitual de pies. Yo llevo varios días utilizándolos solos, sin añadir crema, y el efecto es genial, hidratan un montón y se quedan los pies muy suavitos, aunque ya de por sí no tengo mal los pies, ya os contaré en breve por qué.

El precio es sobre los 15 € y duran unos 5 meses, a partir de los cuales el efecto del gel va desapareciendo.

Desde luego que, para las más perezosas o faltas de tiempo, como yo, vienen genial! Los tengo en el salón y me los pongo por la noche mientras veo la tele o escribo mis posts. Sí, no es muy decorativo tener unos calcetines en el salón junto a la plantita de la mesa, jajaja, pero los podéis guardar en un cajón o lugar discreto y, cada 2 noches, hacéis la sesión y veréis qué bien!!!

Como veis en la foto, también existen en la versión para manos, con forma de guante. Estos no los he probado, pero me imagino que funcionarán igual de bien y con el mismo método que los calcetines para los pies. Si alguien los ha probado, que nos cuente su experiencia! 🙂