La semana pasada, que estuve con mis sobris (2 y 5 años), me di cuenta de lo complicado que puede ser, a veces, el proteger a tus niños de las radiaciones solares, pues llegan a la piscina (o a la playa) deseosos de meterse en el agua, y lo último que les apetece es que les frenes esas ganas para darles la cremita de turno… Por ello, son ideales los protectores solares como el que hoy os presento, este de Lancaster, una bruma solar invisible con protección 50, cuya aplicación es una auténtica gozada, no pringa nada (antiarena), refresca, se aplica en un santiamén e, incluso, se puede utilizar sobre la piel mojada, perfecta para los retoques a lo largo de la jornada.
El Pantenol, un activo conocido en pediatría por sus efectos calmantes y enriquecido con provitamina B5, es la base de la fórmula que, además, también cuenta con agentes hidratantes, como la glicerina o el aceite de babasu.
A diferencia de los solares estándar de Lancaster, Sun For Kids no contiene el famoso Tan Activator Complex de la marca. Este activador de melanina no es necesario para una edad en la que la rapidez del bronceado no es algo prioritario, centrándose más en la protección y la practicidad de uso para hijos y padres.
Os recomiendo, sin duda, que la probéis todos los que tengáis niños pequeños, merece la pena la inversión (cuesta sobre los 18 €) y descubriréis un antes y un después en las cremas solares infantiles.
2 Comments
Maria
14 agosto, 2013 at 9:57 am¡Perfecto! Los niños tienen que tener una aplicación muy alta, y este protector solar parece muy bueno.
angeles
14 agosto, 2013 at 9:49 pmNo tengo niños así que no estoy al día de productos para ellos.